martes, 17 de julio de 2012

Alguna mentira sobre el ERE de RTVV

Pues ya tenemos ERE a la vista. Si es que al final... el que la sigue la consigue, y ere que ere, llegamos al expediente de regulación de empleo.
Los números han sido presentados, y como todos sabrán, afectarán a un máximo de 1295 trabajadores. Quedarán 400 para hacer "la nueva televisión". Vamos, que se cargan la tele.

A la vista de la afección de los despidos por departamentos, y como va a quedar la nueva estructura de RTVV, se puede desprender por donde van a ir los tiros en cuanto a proyecto de radio y televisión. Y si: es lo que habían anunciado. Informativos y deportes se deberán seguir "haciendo" por los pocos profesionales que queden (con excepción de las tareas técnicas); quedará una mínima estructura de servicios comunes, y TODO lo demás, externalizado. Y claro, todo lo demás es medios técnicos, documentación (¡¡¡se va a poner todo el fondo audiovisual existente en manos privadas!!!), producción de programas, servicios generales, y un sinfín de tareas que actualmente eran realizadas por personal de plantilla y que, evidentemente, se deberá seguir haciendo por empresas subcontratadas, a las que habrá que pagar. Y todo eso, para dos cadenas de televisión y otras dos de radio, mas el área de multimedia. Vamos, las mismas necesidades que existen actualmente.

Este es uno de los modelos posibles de futuro. Existían otros. Se podría haber optado por reducir todo el grupo a una sola cadena de televisión y otra de radio. Produciendo programas internamente. Reduciendo personal, porque verdaderamente sobra, pero lo justo y necesario. Controlando gastos, y realizando una gestión y una dirección no ya eficiente, sino simplemente profesional. Con este modelo se podría realizar una radio y una televisión de proximidad, de todos los valencianos, con aceptable calidad, muchísimo más barata, y sin el coste social que supone un ERE de esta envergadura. Pero no. Se ha optado por un modelo completamente diferente. Es una opción. Una opción que se ha vendido como la única posible que reuniera el atributo de economía de costes. La única que dicen, es económicamente viable.

Para ello se ha expuesto una argumentación muy concluyente. Con los 1290 despidos, se van a ahorrar 54 millones de euros en coste laboral de estos trabajadores. Eso si, las tareas que realizaban deberán de ser ejecutadas por empresas externas, muy eficientes, infinitamente más que RTVV, por lo que calculan que su coste rondará los 10-12 millones. El ahorro es claro: 42 o 44 millones de euros. Estas simples cifras justifican de cara a toda la sociedad la necesidad de la medida tomada.

Pero... ¿realmente se puede externalizar todo lo que hará falta, por 10-12 millones de euros?. ¿Se podrá contratar a empresas privadas para que gestiones los medios técnicos y demás necesidades por esas cifras? Pues veamos un pequeño ejemplo, muy reciente, y muy próximo. La televisión autonómica de Aragón, ha adjudicado el pasado mes de junio a una ute formada por Vértice y Telefónica, el servicio de explotación técnica de su centro de producción de programas. El importe final ha sido de 37,4 millones de euros. Tiene una duración de dos años.

A la vista de este ejemplo, solo me queda pensar que, o estos "mañicos" son tontos, o nos han querido tomar otra vez el pelo (mentir descaradamente), con lo de los ahorros del nuevo modelo de radiotelevisión valenciana. La pena es que solo el tiempo lo dirá, y ya será demasiado tarde. Pero apuesto a que los importes de la privatización encubierta de los servicios que se "erosionan", superarán en mucho los 54 millones que dicen ahorrarse con el ere. El final de la historia todos la imaginamos. Una televisión valenciana que no será más barata para el contribuyente que la actual, de peor calidad y en castellano. Pero eso si, hecha por sus amiguetes, y limpia de personal para poder empezar otra vez a meter a sus allegados.


No hay comentarios:

Publicar un comentario